viernes


Llegó a la pirámide, cansado de andar el mundo, se sentó a meditar. Vestía su ropa cotidiana, camisa y pantalón de algodón, lisos y sencillos y unas sandalias. Detrás de si había dejado sus estudios de ciencias, sus grados y postgrados de física e ingeniería. 
Había renunciado al doctorado, a continuar trabajando dentro del Instituto de Astrofísica para el que lo había hecho por más de dos décadas y para un sistema que aunque, por momentos estimulante, por momentos promisorio, en el fondo nunca le había proporcionado respuesta a sus inquietudes más profundas. Pues ese sistema tenía compromisos que lo llevaban a buscar y no encontrar. Las respuestas anheladas desde el fondo de su corazón, solo las encontraría en su interior, y esa búsqueda lo llevaba a aquella cita.

Suavemente, agradeciendo al monumental entorno y a los guardianes temporales e intemporales  de la maquinaría sagrada que contemplaba, cerró los ojos. Sus maestros se hicieron presentes y lo llevaron a las dimensiones superiores que desde siempre lo habían guiado, consciente o inconscientemente. Estaba en casa, había regresado, al menos por un momento.
Compartía con sus hermanos cósmicos sus experiencias, a su vez ellos le ayudaban a recordar su misión terrestre y le daban ánimos para continuar, pues eran muy duras las experiencias en aquella distante dimensión a la que temporalmente había accedido ingresar para aprender y ayudar.

En tanto un grupo de expertos en diversas disciplinas: Arqueológía, arqueoastronomía, ciencias nucleares, etc., de reconocidas universidades internacionales intentando desentrañar los misterios de aquella zona con sus métodos occidentales, llegaban a la misma pirámide y junto a aquel hombre que se encontraba como dormido.

Algunos de ellos al verlo pensaron para sus adentros, otra fanático de la nueva era, ignorante, otros pensaban pobres mexicanos holgazanes, por eso no prosperan.
Al sentir las energías emanadas por los integrantes de aquel grupo, el hombre dirigió un momento su mente hacia ellos y les envió un pensamiento de Paz mientras para sus adentros pensaba, aunque por ahora no lo puedan comprender.

IN LACK ECH - HALA KEN (Yo soy tu - Tu eres yo).